viernes, 2 de septiembre de 2016

La tragedia de Samsung con el Galaxy Note 7

Se acaba de anunciar de manera oficial que Samsung suspende la producción de su teléfono estrella, el Galaxy Note 7, el teléfono de más alta gama que ha desarrollado la marca por sus buenas cualidades y características, menos una, su batería, puede explotar e incendiarse.  Una verdera tragedia para la marca. Adiós no sólo a los miles de millones de dólares que van a perder sino también a algo que les va a doler y mucho: su reputación.



A principios de 2014 compré el Galaxy Note 3, en ese año era el mejor teléfono de todos los tiempos, es el mismo teléfono que hasta la fecha sigo usando, el aparato es funcional para trabajar, sobre todo para los gestores de contenido en Social Media, como es mi caso, me permite poder trabajar con sus buenas fotos que puedo capturar, así como un video de buena calidad. El teléfono sirve para poder trabajar varias aplicaciones a la vez: tomar notas, mientras posteo contenidos y poder usar el lápiz para poder usar tres ventanas en la pantalla, todo esto sin que el teléfono colapsara la memoria ni se volviera lento, en realidad es un buen teléfono con excelentes funciones y muy buena productividad.

El 19 de Agosto llegó a México el tan esperado Galaxy Note 7, el poderoso phablet (teléfono tableta) de la marca Samsung, para hacer frente a Apple y su Iphone 7, se anunció su preventa con un precio de casi 18 mil pesos, un precio bastante alto, podías pagarlo a plazos de hasta 24 meses, donde al final ibas a terminar pagando 24 mil pesos por un teléfono y el Gear VR (Visor de de realidad virtual).



El Galaxy Note 7 quedó a deber mejores características, pues sus primeras críticas lo decían: es un Galaxy 7 Edge pero con lápiz, ya que ambos teléfonos son casi idénticos, se esperaba una mejor mejor memoria RAM y tan sólo la sacaron al mercado con sólo 4 GB, además se esperaba una mejora en la batería y sin embargo sólo dieron a los usuarios 3000 MA, cuando otros teléfonos de gama alta te ofrecen al menos 4 mil. En fin, sólo son algunas observaciones en contra de dicho teléfono.

El Galaxy Note 7 iba a renovar el concepto de los teléfonos de alta gama al menos en nuestro país, ya no lo logró, se quedó en un buen intento, se acaba de anunciar que las baterías instaladas en los teléfonos pueden explotar e incendiarse, ante ello la marca tuvo que recular, salir a anunciar de manera oficial que van a parar la producción de los Galaxy Note 7 y no sólo eso sino que también van a invitar a todos los usuarios que ya lo compraron que regresen los teléfonos. Esto es sin duda un verdadero fracaso para la marca por todo lo que esto conlleva.



Samsung y el fracaso del Galaxy Note 7 le va a costar miles de millones de dólares, quizá eso con el tiempo lo puedan recuperar, pero lo que quizá ya no van a poder recuperar y que les va a doler mucho es la reputación, ese es el quizá el mayor valor que toda empresa debe conservar en todo momento. Ahora quien de ahora en adelante se va a aventurar a comprar un teléfono Samsung, teniendo el antecedente que pueden explotar e incendiarse y lesionarte el alguna parte de tu cuerpo. Vaya tragedia que tienen que afrontar los de Samsung. 

Vamos a ver cómo reaccionan las empresas que dan servicio vía celular, exacto, me refiero a Telcel, AT&T y Movistar. Se tendrán que fijar posturas ante este escándalo, sobre todo por el regreso de los aparatos y el posible reembolso de los dineros. Otro aspecto importante es el tipo de sanciones de las distribuidoras a Samsung por lo daños y perjuicios que esto les va a conllevar y mientras todo esto sucede yo ahorraba para poder comprarme el Galaxy Note 7, esto ya no será realidad, queda en meta truncada, seguiré trabajando como siempre con mi Galaxy Note 3, un poco ya gastado por el uso rudo diario,  con un arreglo en el centro de carga, con compras de nuevos cables y fundas protectoras, mucho dinero extra invertido en ese teléfono, pero pese a todo sigo y seguiré trabajando, hasta que quizá salga el Note 8, tal vez no, tal vez sí, hasta entonces.

Mi Galaxy Note 3






lunes, 8 de agosto de 2016

Larga vida al Panteón



En esta vida hay bandas que te marcan para siempre por el mensaje de sus canciones, el ritmo, las interpretaciones y sobre todo por que han sabido salir adelante a pesar del tiempo y de los diversos obstáculos que se ponen delante, ahora varios años después como bandas consolidadas, los orígenes son los mismos, no se ha perdido la esencia.


Conocí al Panteón Rococó por la Dosis Perfecta, en ese entonces yo iba en la gloriosa Preparatoria 9  y recuerdo haber comprado el CD, por cierto, era la primera edición del disco "A la izquierda de la tierra" con una disquera independiente. En esos años se realizaban "toquines" de bandas ska en terrenos baldíos donde se montaba un escenarios y lo mejor del toquín era el slam, aunque no te pudieras levantar al día siguiente.


Panteón Rococó inició desde abajo, tocando en fiestas, en espacios clandestinos, su mensaje de justicia, paz y libertad lo ha conservado a lo largo de 20 años de trayectoria. Desde que escuché por primera vez el disco "A la izquierda de la Tierra" supe que Panteón Rococó no era una simple banda de ska más, era y sigue siendo una banda de ska con un mensaje muy claro y que se iba a consolidar como una banda representativa de México.


Durante mi etapa de la secundaría y la prepa, la ideología de ser de izquierda estuvo muy presente, aunque algunos de quienes nos la inculcaron, claudicaron en el camino. Conocí el Movimiento del 68, la Represión de Tlatelolco, el Halconazo, el levantamiento Zapatista de 1994 en Chiapas,  la Huelga de la UNAM, el movimiento campesino por la defensa de la tierra de Atenco. Posturas que Panteón Rococó reforzó con los mensajes de sus canciones, se forjó una ideología. 


Durante la prepa me acuerdo mucho de los toquines que se realizaban en CU, en el estadio de prácticas, muchas bandas de ska tocaban en ese lugar: Nana Pancha, Sekta Core, Los de Abajo, entre muchas bandas más y desde luego el Panteón. En esos años era muy común llevar un kilo de arroz o de frijol para poder entrar a los toquínes. Todo lo recaudado era para llevarlo a loas comunidades autónomas zapatistas.


Allá me tocó ir dos veces, desde las 3 de la tarde ya estaban las primeras bandas tocando, hasta las 9 salía el Panteón Rococo para entonces la multitud ya esperaba ansiosa, se hacían los "círculos de paz" para recibir al Panteón y el polvo nos llegaba a todos, no importaba.  Hoy esos conciertos ya no se realizan, las cosas han cambiado mucho en CU.  Recuerdo muy bien cuando me dijeron que los integrantes de Panteón habían estudiado, también, en la gloriosa Prepa 9, más creció mi admiración a la banda, sobre todo porque en esa época se reforzó mis ideales y valores que hoy sigo conservando y respetando.  


Luego los años pasaron como agua y así pasaron igual muchas cosas que me tocó vivir y ser testigo de hechos han cambiado el rumbó de mi vida y también de este lastimado país. Panteón Rococó se internacionalizó, ahora realizaban conciertos en Alemania, España y otros países llevado el ska a otras regiones junto con Ska-P, otra excelente banda. 


Me tocó volverlos a ver en vivo en 2008 y 2010 durante la lucha por la defensa de los presos políticos de Atenco, líderes sociales con condenas de más de 100 años de cárcel. Cámara en mano hacía reportajes para Kaja Negra, una revista electrónica de colegas de la facultad, en ese entonces caminaba por las calles recogiendo historias, mi lente capturó algunas imágenes de aquellos conciertos por la libertad. También volvieron a  CU, en esta ocasión para solidarizarse con los electricistas del SME, echados a la calle tras un decreto que desaparecía su fuente de trabajo. 


Podría narrar más anécdotas del Panteón, pero me quedo con estas, la historia se sigue escribiendo, las canciones se siguen contando, los mensajes se siguen difundiendo y el ritmo persiste, sea pues una enorme felicitación al Panteón por sus primeros 20 años. 

Larga vida al Panteón Rococó! 






y ser tu sueño fugaz :)



viernes, 22 de julio de 2016

Campus Party y Aldea Digital: de los grandes contenidos a la enorme desilusión

Tuve la oportunidad de ser uno de los 3527 campuseros que integramos la primera edición de la Campus Party México 2009. Era un evento muy esperado por los fanáticos de las nuevas tecnologías y del conocimiento. Por fin llegaba a México la Campus Party, el mayor evento de tecnología, directo desde España, era una gran realidad. 

Desde meses atrás compré mi entrada, además de pagar la comida y la casa de campaña, ya que el evento duró cinco días, se realizó en Expo Bancomer, en la zona de Santa Fé. En ese año yo no tenía laptop y me llevé mi PC, cargué con monitor, CPU, teclado y diversos cables, me sentía en mudanza, pero no era el único, cientos de los jóvenes que llegábamos a Campus Party llegaban cargando en cajas sus equipos de computo, pues íbamos a vivir y convivir por cinco días.



Lo mejor de Campus Party, además de ofrecerte la mejor conexión en alta velocidad, eran las conferencias con un gran contenido, múltiples horas formativas acerca de de diversas temáticas, yo me enfoqué en el Área Social Media, tuve la oportunidad de poder asistir a muchas conferencias, con exponentes de primer nivel. Recuerdo haber iniciado por primera vez streaming desde la plataforma Livestream. 



Para la 2a edición de Campus Party en 2010 también tuve la oportunidad de poder asistir, de nueva cuenta volver a ver a miles de campuseros de distintas partes del país que acudieron para poder conocer a más personas, asistir a conferencias, conocer lo nuevo en tecnología, escuchar a los mejores ponentes, era sin duda el mejor evento y no había nadie que le hiciera frente, hasta entonces. 

Campus Party era patrocinada por Telefónica, la principal empresa de comunicaciones en España, en México, Carlos Slim no se quiso quedar atrás y por medio de Telmex desarrolló la Aldea Digital, evento que nace para hacer frente a Campus Party, pero nunca le pudo llegar a los talones de lo que realmente ERA Campus Party.

Hay muchas diferencias muy claras entre ambos eventos, veamos algunos de ellos

Para ir a Campus Party, es necesario pagar tu entrada. En Aldea Digital la entrada es gratis
Para estar en Campus Party podías quedarte a acampar. En Aldea Digital vas de entrada por salida
En Campus Party conoces a personas de varias partes del país. En Aldea Digital sólo asisten puros capitalinos. 


Desde un inicio no me llamó la atención de la Aldea Digital, aunque he ido varias ocasiones a ver como estaba, me di cuenta que TELMEX y compañía piensan que la sociedad es inculta y alejada de la tecnología, había talleres de cómo crear por primera vez tu correo electrónico, de ese nivel las conferencias. Hoy las cosas no están muy alejadas de las anteriores ediciones de Aldea Digital.

Mi última Campus Party a la que asistí fue el año pasado, me motivó bastante que Bruce Dickinson iba a a dar la conferencia magistral en el escenario principal, desde meses atrás y al igual que en la 1a edición compré con mucho tiempo mi boleto, pagué además mi casa de campaña y pagué mi traslado a Guadalajara, lugar donde se desarrolló el evento.



La conferencia de Bruce Dickinson fue excelente, escuchar a una persona que ha triunfado en esta vida, que además de ser el vocalista de Iron Maiden, es un empresario muy exitoso, tiene una marca de cerveza, es dueño de una empresa de aviación, en doctor en música, esgrimista profesional, escritor, profesor, historiador, actor, en fin. Escucharlo y perder el miedo de dar ese paso que te de la libertad de realizar lo que realmente te gusta y lo mejor, vivir de eso. Salí demasiado motivado, tanto que al día siguiente me fui de Campus Party, dejando atrás otras conferencias. 

Hoy quedo totalmente frustrado de ambos eventos, se volvieron demasiado comerciales, sólo les interesa el dinero y dejaron atrás la calidad de los contenidos, sobre todo Campus Party, para mi el mejor evento de tecnología, ya no lo es, ahora el evento fue adquirido como franquicia comercial, donde el Gobierno de Guadalajara es el principal patrocinador, por eso los contenidos se han limitado mucho, ya no hay quien se atreva a decir que el Gobierno es el principal censor de la libertad de expresión, que es el principal promotor de querer regular el internet y las redes sociales, y así muchos contenidos que eran muy buenos se fueron difuminando.



Desde la pasada Campus Party comprendí que ya no volvería a asistir a otra Campus, no iba a derrochar mil pesos de entrada por ver contenidos malos, que no aportaban nada a crear nuevas cosas. De hecho eso fue otra de las frustraciones: ver como invitaban a los campuseros a desarrollar grandes ideas en cuanto a tecnología y desarrollo de apps para que al final sólo les dieran una módica cantidad de dinero y un diplóma. Mientras el gobierno y empresarios se quedaban con la idea, la sacaban adelante y lucraban ampliamente con la idea y el proyecto de una persona que jamás le van a reconocer ni apoyar más adelante. Eso frustra.

De Aldea Digital, el evento es meramente del Gobierno de la Ciudad de México, tuve la oportunidad de asistir a la inauguración, ahí estaba, además de Mancera, Slim, Nuño, hasta Carlos Marin, el periodista defensor de Peña Nieto, estaban muchos empresarios, militares y marinos ¿_? 

Aldea Digital terminó siendo un bodrio, algo que ya no aspira a más, busqué en su página web las conferencias y muchas eran del gobierno, otras más sobre cambio climático y tratar de convencer que son los autos los que contaminan este ambiente y no las empresas tan buenas que se preocupan.



Aldea Digital ya se va a realizar cada año en el Zócalo de la CDMX, mientras que Campus Party ya se quedó para siempre en Zapopan Jalisco, de allá son sus nuevos dueños. Se acabó totalmente el entusiasmo y la esencia original del concepto LAN Party, ahora es aprovechado por los gobiernos y empresarios para aprovechar estos foros para hablar de las acciones que realizan, de las reformas que aprobaron y de varias cosas más, nada de lo que originalmente era Campus Party.

Ahora la mayor preocupación de Aldea Digital ya no son los contenidos, ahora lo que importa es romper el Record Guiness de el mayor número de asistentes, aunque sea llenándolo de acarreados de los diversos programas sociales, como sea hay que llenar el lugar todos los días que dure la Aldea Digital.  Esperan más de 400 mil asistentes, ni Obama tiene tanta audiencia, no sale, no da, pero lo que importa son los números, patético. 

Estoy seguro que no volveré a asistir a ninguno de los eventos, sobre todo porque Campus es demasiado caro y los contenidos son muy malitos y de Aldea Digital porque es todo menos una LAN Party y porque a Carlos Slim lo utiliza a su mayor acomodo demostrando porque es el dueño de todo el Centro Histórico de la CDMX.



Seguro se me van unas cuantas ideas más, pero en esencia es eso: Campus Party y Aldea Digital dejan mucho que desear como aportadores de contenido, de difundir grandes ideas, de desarrollar proyectos importantes, de hacer nuevas tecnologías, de apostarle al emprendedurismo como forma de vida y no como trabajar para alguien más con una idea tuya.

Dudo mucho que las cosas cambien
Pero estoy seguro que se abrirán nuevos espacios donde los contenidos nuevamente estén presentes.

Espero con ansias ese momento